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¿Cómo es la Pasión y Crucifixión de Jesucristo en la Biblia?

Descubre el relato bíblico de la Pasión y Crucifixión de Jesucristo y los personajes de este episodio en los evangelios

Redacción / Agencia. México., 17 de abril de 2025.-La Pasión y crucifixión de Jesucristo son el corazón del relato bíblico, pero ¿cómo describen exactamente los evangelios estos momentos cruciales? 

Acompáñanos en un recorrido para desentrañar el relato, desde la Última Cena hasta la sepultura, explorando esta etapa de la vida de Jesucristo, los personajes clave y lugares emblemáticos que han pasado a formar parte de la tradición.

La Pasión y crucifixión de Jesucristo en la Biblia
El relato principal de la Pasión y Crucifixión de Jesucristo se encuentra en los cuatro evangelios canónicos:

  • Mateo: capítulos 26 y 27
  • Marcos: capítulos 14 y 15
  • Lucas: capítulos 22 y 23
  • Juan: capítulos 18 y 19

En cuanto a estos, se relatan los siguientes acontecimientos destacados.

La Última Cena

Jesucristo, con sus discípulos, celebra la Pascua. Envía a Pedro y Juan a preparar el lugar. Al llegar la noche, se sienta a la mesa con los doce. Durante la cena, anuncia que uno de ellos lo traicionará, causando gran tristeza entre los discípulos. Judas es señalado como el traidor. 

Instituye así la Santa Cena o Eucaristía, como memorial de su sacrificio. Finalmente, cantan un himno y salen al monte de los Olivos. 

Juan añade el relato del lavamiento de los pies por parte de Jesús, como ejemplo de humildad y servicio, y la identificación explícita de Judas como el traidor que se retira para llevar a cabo su plan.

Este parte está presente en: Mateo 26:17-30, Marcos 14:12-26, Lucas 22:7-38, Juan 13:1-30.

El arresto de Jesucristo
En Mateo 26:47-56, Marcos 14:43-52, Lucas 22:47-53, Juan 18:1-11 se narra que mientras Jesucristo aún hablaba en el huerto de Getsemaní, llega Judas Iscariote acompañado de una multitud con espadas y palos, enviada por los principales sacerdotes y los ancianos del pueblo. 

Él había acordado una señal con ellos: besarlo para identificarlo, luego es arrestado.

La negación de Pedro
Después del arresto de Jesús, Pedro sigue a la multitud hasta el patio del sumo sacerdote, manteniéndose a distancia. Una criada lo reconoce y lo acusa de haber estado con Jesús. Pedro niega conocerlo. 

Pedro lo niega por tres veces, maldiciendo y jurando que no conoce al hombre y entonces se acuerda de las palabras de Jesús: «Antes que cante el gallo, me negarás tres veces». Relato presente en Mateo 26:69-75, Marcos 14:66-72, Lucas 22:54-62, Juan 18:15-18, 25-27.

Jesucristo ante Pilato y la corona de espinas

En Mateo 27:1-2, 11-26, Marcos 15:1-15, Lucas 23:1-25, Juan 18:28-19:16 se cuenta que Jesucristo fue entregado ante Poncio Pilato, un gobernador romano. 

Pilato lo interroga y como era costumbre en la fiesta de la Pascua, se ofrecía liberar a un preso que el pueblo escogiera, seleccionando así a Barrabás y, después de azotar a Jesucristo, lo entrega para que sea crucificado. 

En Mateo 27:27-31, Marcos 15:16-20, Juan 19:1-3 se cuenta que los soldados del gobernador lo llevan al pretorio y reúnen a toda la compañía alrededor de él. Lo despojan de sus vestidos y le ponen una túnica escarlata o púrpura. Le tejen una corona de espinas, la colocan sobre su cabeza, y le ponen una caña en su mano derecha.

El camino al Calvario
En Mateo 27:32, Marcos 15:21, Lucas 23:26, Juan 19:17 se cuenta que cuando llevaban a Jesús, encontraron a un hombre de Cirene, llamado Simón, que venía del campo; y le obligaron a que llevara la cruz de Jesús. 

Una gran multitud del pueblo y muchas mujeres que lloraban y lamentaban por él lo seguían. Lucas añade que Jesús se volvió hacia ellas y les dijo que no lloraran por él, sino por sí mismas y por sus hijos. Juan simplemente indica que Jesús, cargando su cruz, salió al lugar llamado de la Calavera, y en hebreo, Gólgota.

La crucifixión de Jesucristo

Llegaron al lugar llamado Gólgota. Allí crucificaron a Jesucristo, y con él a otros dos. Desde la hora sexta (mediodía) hubo tinieblas sobre toda la tierra hasta la hora novena (tres de la tarde).
Cerca de esta hora, Jesucristo clamó a gran voz: «¡Elí, Elí, ¿lama sabactani?», que significa: «Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?».

Algunos de los que estaban allí decían que llamaba a Elías. Uno de ellos corrió y, empapando una esponja en vinagre, la puso en una caña y le dio a beber.

Juan añade detalles sobre las palabras de Jesús desde la cruz, incluyendo su encargo a su madre y al discípulo Juan. También relata cómo uno de los soldados le traspasó el costado con una lanza, y al instante salió sangre y agua, cumpliéndose las Escrituras. 

Esto según Mateo 27:33-56, Marcos 15:22-41, Lucas 23:33-49, Juan 19:18-37.

Fuente: Milenio

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