En su mensaje a la feligresía católica reunida en la Iglesia Catedral de esta capital, el prelado católico recordó que esta semana concluye el año eclesiástico y se celebra a Cristo Rey, quien dijo, debe ser un ejemplo de vida, donde se enarbole la bondad, la verdad, el amor, la justicia, en la vida.
Ahí aprovechó para recordar que hoy se está sumergido en un ambiente en donde proliferan los insultos a través de las redes sociales, escuela, la calle, como parte de una vida agresiva y hasta violenta; además hace un llamado a ser bondadosos y atender a los más necesitados.
Destacó que la sociedad tiene mucha mentira en todos los ambientes, “el padre de la mentira es el diablo, y si nosotros mentimos somos acólitos del diablo, no respetamos la vida, desde el aborto, los asesinatos, el secuestro, violencia de tanta muerta y nos consterna a toda la sociedad, si tenemos poco respeto a la vida, tenemos que luchar porque haya un mayor respeto a la vida en todas sus manifestaciones”.
Aunque reconoció que vivir así puede ser difícil para los hombres y mujeres comunes, agregó que además debe vivir en justicia, es decir, dar a cada quien lo que le corresponde, no explotar a nadie, no abusar de nadie.
En cuanto al amor, dijo, poco nos preocupamos por los demás, existe mucha división, polarización en la ciudadanía, de ahí el llamado a la reconciliación y el perdón.
Finalmente, dijo a su feligresía que es importante tratar de vivir en paz y rechazar la violencia en todos sus aspectos, “el vivir unos con otros respetándonos y estos es fruto de la justicia y el amor, que haya reconciliación entre sectores sociales”.