Redacción / Ventanaver. Xalapa, Ver., 22 de septiembre de 2024.- La Arquidiócesis de Xalapa afirmó a través de su comunicado dominical que las reformas al Poder Judicial y a la Guardia Nacional, deben favorecer división de los tres poderes de la República y dar seguridad a toda la ciudadanía ante la ola de violencia que no cesa en el País, al mismo tiempo que cuestiona por qué se debe normalizar tanta inseguridad.
A continuación, el comunicado:
Las circunstancias sociales, económicas, políticas y culturales que se viven en nuestra patria durante este mes de septiembre deben ayudar a cada ciudadano a centrarse en lo esencial de la vida personal y social, para no perder el horizonte del bien común, la paz social y la justicia real en beneficio de los que más sufren la marginación y el desprecio. Las reformas al Poder Judicial y a la Guardia Nacional deben favorecer la vida democrática con la división de los tres poderes de la república y dar seguridad a toda la ciudadanía ante la ola de violencia que no cesa en nuestra nación mexicana.
La ciudadanía y todos los creyentes deben conocer más sobre la verdadera finalidad de las decisiones que impactan en la convivencia y vida de todos, para estar dispuestos a demandar a las autoridades y gobierno para que gobiernen para el bien de todos, pues la democracia y el desarrollo integral no debe ser mera ficción y falsas promesas, sino hacer que cada mexicano logre salir de las condiciones deshumanizantes que vive cotidianamente.
Siempre será conveniente reflexionar y preguntarnos, para no perder de vista la finalidad auténtica de las decisiones de quienes tienen la responsabilidad del gobernar para el bien de todos: ¿por qué han de seguir en la pobreza millones de mexicanos si tenemos los recursos económicos y naturales para generar proyectos que los incorporen al desarrollo integral? ¿Por qué ha de ser el poder, y no el bien común, lo que rija las grandes decisiones política y sociales de nuestra patria? ¿Por qué hemos de aceptar como algo lógico y habitual tanta violencia que produce un dolor profundo en cada familia lastimada por la violencia e inseguridad? Hemos de revisar y reflexionar nuestro compromiso como ciudadanos e hijos de Dios, para reconocer lo que está en nuestras manos hacer por el bien de todos.