Redacción / Milenio. México. 10 de enero del 2022.- Los precios del petróleo subieron levemente, tras las interrupciones en los suministros de Kazajistán y Libia que contrarrestaban las preocupaciones derivadas del rápido avance en las infecciones de ómicron.
El crudo Brent avanzó 19 centavos, o 0.2 por ciento, a 81.94 dólares por barril. En tanto, el petróleo West Texas Intermediate (WTI) de Estados Unidos ganó 20 centavos, o 0.3 por ciento, a 79.10 dólares por barril.
Durante la semana previa, el crudo subió 5 por ciento, luego de que las protestas, en Afganistán, interrumpieran las líneas de ferrocarril y golpearan la producción en el principal campo petrolero del país; Tengiz.
Asimismo, el mantenimiento de oleoductos, en Libia, hizo caer el bombeo a 729 mil barriles por día, desde un máximo de 1.3 millones de bpd el año pasado.
Por otra parte, la empresa petrolera más grande de Kazajistán, Tengizchevroil (TCO), está aumentando gradualmente la producción para alcanzar tasas normales en el campo de Tengiz. Esto, luego de que las protestas limitaran la producción en los últimos días, señaló, este domingo, el operador Chevron.
«Por lo tanto, los vientos a favor de los precios del petróleo debido a las preocupaciones sobre el suministro deberían disminuir, lo que sugiere que los precios caerán esta semana.», dijo Carsten Fritsch, analista de Commerzbank.
El petróleo también se ha visto apoyada por la creciente demanda mundial y de adiciones al suministro por debajo de lo esperado, por parte de la Organización de Países Exportadores de Petróleo, Rusia y sus aliados, grupo conocido como OPEP+.
En diciembre del 2021, la producción de la OPEP aumentó en 70 mil bpd, con respecto al mes anterior, frente al aumento de 253 mil bpd permitido, bajo el acuerdo de suministro de la OPEP+; quien ha levantado, de manera gradual, los recortes a la producción aplicados en 2020, cuando la demanda colapso bajo las cuarentenas para frenar la propagación del COVID-19.
Sin embargo, un aumento en las infecciones por coronavirus ejerce presión sobre los precios del petróleo.
A pesar de los primeros estudios que muestran un menor riesgo de enfermedad grave u hospitalización con ómicron, en comparación con la variante delta, las redes de atención médica en España, Gran Bretaña, Italia y otros lugares se encuentran cada vez más exigidas.