Redacción / Ventanaver. Xalapa, Ver., 20 de agosto de 2023.- El pueblo mexicano necesita, en un clima constante de diálogo y respecto a los derechos yobligaciones que brotan de la naturaleza humana, un proyecto al servicio de México.Cualquier proyecto que se proponga debe tener de sobremanera el servicio de la persona,de las familias, de sus valores y de su historia. Para lograr un proyecto con estas exigenciases necesaria la participación de todos. Un proyecto sin estas cuatros exigencias estaríadestinado al fracaso, pero, sobre todo, llevaría a los mexicanos a la cruel desorientaciónmoral, espiritual y social. Un elemento necesario para conseguir un proyecto vital para losmexicanos requiere, especialmente de los creyentes, de la oración confiada y comprometidaante Dios. Con y mediante la oración Dios puede sanar y configurar el corazón de loscreyentes para vivir la caridad y buscar a toda costa la paz y la justicia como condiciónindispensable para una vida digna.
Para los cristianos la oración es una necesidad prioritaria. Sin la oración toda participaciónen todo proyecto jamás conseguirá alcanzar las condiciones básicas para que todos puedanvivir con dignidad y lograr su realización y vocación trascendente.
A la actitud orante detodos los cristianos se debe añadir el respeto y la garantía del estado de derecho y lajusticia. El respeto de todos por la ley es una obligación de todos, sin excepción de nadie. Espertinente recordar, en relación al respeto de la ley, lo que obispos mexicanos nos señalan,en su carta pastoral Del encuentro con Jesucristo a la solidaridad con todos: “La autoridadpública es, ante todo, una autoridad moral, y, aunque constituida legítimamente, necesitavalidarse mediante el servicio a la sociedad, velando por la observación del derecho y lajusticia” (Número 265). La oración de todos los cristianos y el respeto de ley de parte detodos, sin excepción alguna, es un camino inicial y fecundo del desarrollo de nuestra naciónmexicana.
Orar y trabajar por tener procedimientos legales pertinentes que garanticen el derecho delos padres a la educación de sus hijos es lo mejor que podemos hacer para que se inicie unproyecto de verdadera esperanza y desarrollo para los mexicanos. Ninguna condición básicapara el desarrollo integral dará esperanza y certeza de desarrollo si no participamos todoscon responsabilidad y entrega generosa para vivir con dignidad. Aprovechemos la oración yvivamos el respeto por la ley para ayudar a México a salir de su principales problemáticas.
Pbro. Juan Beristain de los Santos
Director
Oficina de Comunicación Social
Arquidiócesis de Xalapa