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Confirma FGR muerte de Juan Ramos López, mano derecha del Fiscal Gertz Manero

Redacción / Agencia. Ciudad de México., 22 de septiembre de 2023.- Juan Ramos López, el brazo derecho de Alejandro Gertz Manero en la Fiscalía General de la República (FGR), falleció esta noche en la Ciudad de México.

Allegados al funcionario informaron que el Fiscal Especializado de Control Competencial falleció de un infarto del miocardio durante una cirugía de riñón en el Hospital Ángeles del Pedregal, donde también se encuentra internado Juan Collado, a quien metió a la cárcel. Cabe destacar que se encontraba en el piso 6, habitación 619.

Ramos fue operado la semana pasada de las várices y, durante los estudios, le detectaron un tumor en el riñón; por lo anterior, pidió una licencia a la FGR para ausentarse tres días hábiles, para operarse de emergencia del nódulo.

De acuerdo con las fuentes consultadas, ayer jueves el fiscal ingresó por su propio pie al nosocomio y le programaron la intervención quirúrgica para este viernes. Ramos esperaba regresar el martes a sus labores, pero murió hoy en el quirófano.

«Esta institución lamenta profundamente el deceso de nuestro compañero y amigo, Juan Ramos López, como consecuencia de una intervención quirúrgica», informó la FGR.

De 62 años de edad, abogado por la UNAM y aficionado al piano, Ramos fue el funcionario de mayor confianza de Gertz Manero durante más de dos décadas.

Fue director de Derecho y Abogado General de la Universidad de las Américas A.C.; director Jurídico en la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México; Coordinador General de Asuntos Jurídicos y subsecretario de la Secretaría de Seguridad Pública Federal, cargos en los que tuvo como jefe a Gertz Manero.

Antes también fue secretario Técnico de la Comisión de Marina en la LXI Legislatura de la Cámara de Diputados; director General de Supervisión en la Coordinación de Agentes del Ministerio Público Auxiliares del Procurador; Director General en la Visitaduría General y agente del Ministerio Público en la Procuraduría capitalina.

Con la llegada de Gertz a la FGR, fue designado titular de la Subprocuraduría Especializada en Delitos Federales, área que con la reforma a la Ley Orgánica de la dependencia se convirtió en la Fiscalía Especializada de Control Competencial.

Desde esa posición, se convirtió en el brazo ejecutor del titular de la FGR, pues los asuntos más relevantes eran judicializados y litigados por las unidades especiales bajo su mando.

Fue la Fiscalía de Ramos y sus subordinados quienes encarcelaron a Rosario Robles, por el caso de la Estafa Maestra; a Emilio Lozoya, tras ser fotografiado en el Hunan de las Lomas; y a Juan Collado, por tres acusaciones distintas.

El único caso en el que Ramos no pudo lograr su propósito fue el de los abogados y el asesor financiero vinculados a Julio Scherer Ibarra, ex consejero Jurídico de la Presidencia, a quienes imputó sin lograr que fueran procesados por la presunta extorsión a Juan Collado.

En mayo del año pasado un juez rechazó vincular a proceso a los litigantes Juan Araujo Riva Palacio, César Omar González Hernández e Isaac Pérez Rodríguez y el asesor financiero David Gómez Arnau, por los delitos de asociación delictuosa, lavado y tráfico de influencias.

En ese contexto, el 23 de junio siguiente fueron filtrados a redes sociales unas llamadas telefónicas ilegales en las que Gertz presiona a Emilio Lozoya Thalmann, padre del ex director de Pemex, para desistirse de un amparo y revocar a su entonces abogado Javier Coello Trejo.

También se difundió una escucha en la que Juan Ramos asesora legalmente al padre de Lozoya para que reúna los documentos que debe llevar a la audiencia inicial de su esposa Gilda Margarita Austin y Solís, una conversación en la que el propio funcionario admite que no quiere parecer «defensor» de la señora.

Curiosamente, la última instrucción de Ramos también fue en favor de un personaje de alto perfil al que puso tras las rejas: Juan Collado.

El jueves, cuando el litigante solicitó su libertad provisional en su proceso por delincuencia organizada y lavado, los fiscales subordinados de Juan Ramos recibieron la instrucción de no oponerse a la petición.

En la audiencia manifestaron que ya no era necesaria la prisión preventiva de oficio para Collado, razón por la que un juez le decretó su libertad, aunque con el uso de un brazalete electrónico.

Horas más tarde, Ramos moriría en el mismo hospital en el que está internado Collado, a unos metros de su cama.

Fuente: Reforma.

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