Redacción / Agencia. México., 08 de enero de 2025.-Científicos del Museo Británico han descifrado el mapa más antiguo del mundo grabado en una tablilla de arcilla hace unos 3 mil años y han descubierto que entre los dibujos aparece la ubicación del ‘Arca de Noé’.
El artefacto babilónico, conocido como Imago Mundi, muestra un diagrama circular con un sistema de escritura que utilizaba símbolos en forma de cuña para describir la creación temprana del mundo.
Los investigadores del Museo Británico, donde se encuentra la tablilla, revelaron lo que habían descifrado el mes pasado, pero un análisis más profundo de su trabajo descubrió la referencia bíblica dentro del lenguaje antiguo.
Tras los estudios científicos, los investigadores creen que la escritura en forma de cuña que encontraron en el reverso del mapa incluye referencias de la versión Babel, única de la historia de Noé, en donde se cuenta que Dios envió un diluvio que acabó con la humanidad excepto con Utnapishtim y su familia, quienes construyeron un arca y la llenaron de animales, de acuerdo con reportes del medio RT.
En la tablilla también se encontró la palabra «parsiktu», término que aparece en otra tablilla babilónica y que describe al barco que sobrevivió al gran diluvio.
Los investigadores siguieron las instrucciones y encontraron un camino a ‘Urartu’, donde un antiguo poema mesopotámico afirma que un hombre y su familia desembarcaron un arca para preservar la vida.
La ubicación es el equivalente asirio de ‘Ararat’, la palabra hebrea para la montaña donde Noé estrelló el barco bíblico que fue construido para el mismo propósito.
El Dr. Irving Finkel, curador del Museo Británico, dijo al medio Daily Mail:
«Esto demuestra que la historia era la misma y, por supuesto, que una condujo a la otra, pero también que, desde el punto de vista babilónico, esto era una cuestión de hecho. Que si hicieras ese viaje verías los restos de este barco histórico».
Cabe destacar que la creencia de que el Arca de Noé está en el monte Ararat, ha generado debate entre científicos, arqueólogos y teólogos, pues algunos argumentan que las formaciones rocosas de esa montaña serían el resultado de procesos naturales aunque otros defienden que se tratan de naturaleza divina.
La conversación ha generado un debate que se ha intensificado con las afirmaciones de algunos creacionistas, como el doctor Andrew Snelling de la Universidad de Sídney, quien sostiene que la formación de Ararat no pudo haber ocurrido antes de que las aguas del diluvio se retiraran, lo que plantea serias dudas sobre su identificación como el lugar de descanso del arca.
Fuente: Milenio