Redacción / Ventanaver. Xalapa, Ver., 04 de diciembre de 2022.- Este 3 de diciembre la comunidad parroquial de San Andrés apóstol en el municipio de Atzalan, se vistió de fiesta por la visita de su pastor Mons. Jorge Carlos Patrón Wong quien fue recibido por las 26 comunidades que conforman el territorio parroquial. La recepción se dió en el punto conocido como «el tajo», por parte del párroco del lugar el Pbro. Jesús Francisco Mercado C. y de la autoridad civil el C. Carlos García Domínguez. Después de la bienvenida Mons. Jorge caminó rumbo al templo parroquial en medio de las danzas y la feligresía que alegre entonaba porras a su obispo. Una vez llegado al templo parroquial dio inicio la celebración Eucaristíca donde Mons. Jorge Carlos administró el sacramento de la confirmación a 230 niños.
Durante su homilía Mons. Patrón dijo: » estoy muy contento de estar con ustedes por ser una gran familia que crece en la fe mediante la intercesión de la Santísima Virgen María y de San Andrés apóstol. En la Eucaristía vivimos una fiesta donde nos unimos a Cristo quién hace por medio del Espíritu Santo que el amor crezca en nuestros corazones, haciéndonos un pueblo privilegiado porque tenemos un Padre que nos crea, redime y salva por amor; un Señor Jesucristo que sacrifica su vida por amor a nosotros sus hermanos; y un Espíritu Santo que nos santifica. Hoy vemos a nuestros hijos e hijas caminar por el camino del amor, guiados por sus padres catequistas, su párroco y su obispo. En estos niños se cumple la fe recibida no solo de sus padres si no también de sus abuelos acompañados de la Iglesia, hoy se acrecienta el gran regalo del amor de Dios, hoy es un día de fiesta, pues en este tiempo de adviento la vida es una fiesta y de compromiso.
Al confirmarse estos niños se comprometen a ser discípulos de Nuestro Señor Jesucristo, vayan prediquen, hablen del amor de Dios, de la presencia de Cristo confiando siempre en la Gracia de Dios y la compañía de la Iglesia, con la compañía de la Virgen María vivan la vocación primero de un Santo noviazgo y después de un Santo matrimonio y si son llamados al sacerdocio o la vida consagrada vivan la belleza de sus vocaciones siempre estando alegres porque el amor de Dios y la fe renace en cada uno de nosotros. Con María, todos discípulos y misioneros de Jesucristo».
Al finalizar la Eucaristía se tomaron las tradicionales fotos del recuerdo y se concluyó con un convivio ofrecido por el consejo parroquial.