Se derrumba López Obrador, lo abandonan sus aliados
Línea Caliente
Por Edgar Hernández*
¡La única salida, un autogolpe de Estado!
La 4T se desmorona.
Empresarios, partidos, aliados y emisarios del pasado abandonan a AMLO.
Solo bastaron 27 meses para que el principio del fin asomara en el marco de las elecciones intermedias y de cara a la más profunda división de un movimiento hecho partido en el poder, Morena.
Al mal manejo de la pandemia, las corruptelas y mentiras del Peje, se suma el desánimo ciudadano.
Este es el escenario.
Los malos gobernadores de extracción morenista, la desatinada selección de candidatos que continúen con el proyecto como es el caso del multi violador sexual Félix Salgado Macedonio; una dirigencia sin cabeza que nadie obedece, la confrontación de las tribus morenas y una franca desesperación del mandamás, López Obrador, quien no acierta con sus actitudes autoritarias, dan al traste al afán continuista.
Mientras, oscuras fueras aliadas poco a poco empiezan a hacerse a un lado, a desmarcarse ante el incumplimiento de compromisos.
El expresidente Carlos Salinas, aliado a la derecha y en franca complicidad con sus pares, Fox y Felipe Calderón, invierten en el desánimo social y prohíjan una punta de lanza empresarial que encabeza el poderoso regiomontano José Antonio Fernández, al cual se suman el sector empresarial nacional y muchísimos más organizaciones civiles y privadas inconformes.
El movimiento “Frena”, los colectivos, amplios grupos estudiantiles, medios de comunicación, líderes de opinión y partidos políticos como Movimiento Ciudadano, quien hace meses abandonó el barco de Morena, también abrazan la causa.
A la par, el abandono del campo y el descuido de las zonas marginadas en abono a la pobreza extrema, han creado un caldo de cultivo propicio para el voto de castigo.
Taxistas, amas de casa, obreros, la tercera edad engañada y la burocracia misma ya no quieren más promesas y engaños; no más toscas mentiras y quimeras de un necio presidente que todo los hace por sus huevos.
En tanto, en los partidos políticos es un hecho la alianza ¡Va por México!, una coalición electoral que busca darle palo al poder legislativo sumiso. Será el contrapeso y un hasta aquí al abuso presidencial que reclama obediencia absoluta, disciplina total “¡O están conmigo o están contra mí!”.
Es el pueblo que grita un ¡Ya basta! al empeño pejista de “¡El Estado soy yo!”; en donde a su antojo hace gobernadores a sus juanitos Cuitláhuac, Cuauhtémoc y Barbosa.
La ciudadanía ya no quiere más complicidades de las autoridades con el crimen organizado, ni alianzas inconfesables con la familia de “El Chapo” Guzmán, como tampoco está de acuerdo en la acelerada militarización del país.
Es por ello que los mismos aliados naturales de la supervivencia, a los que López Obrador llama Fifis, conservadores o mafia del poder – a quienes censura, pero no lleva a la cárcel-, simplemente ya no quieren jugar con él.
Es el caso de la franquicia de Fidel Herrera, el Partido Verde, que pintó su raya al rechazar la alianza tras el célebre twit de Rosa Borunda del –Quiero manifestar mi inconformidad por la subasta de candidaturas en el @PRIVeracruz_ En Xalapa votaré por @ahuedricardo, no por Morena! Voto razonado!-, que confirma una ruptura anunciada.
El acontecimiento más importante que se registra por estos tiempos es, sin embargo, el fenómeno ciudadano.
Amplios sectores de la población, en público y en privado, han manifestado su descuerdo con la forma de gobernar que lleva AMLO tras los claros indicios de que está llevando al país a un abierto socialismo cuya fatalidad es el racionamiento y extrema pobreza.
“¿Para qué quieren más, si con unos zapatitos, un pantalón y un modesto carrito tienen suficiente?”, le grita a la población quien vive en un Palacio con todos los lujos y comodidades al más puro estilo del emperador Maximiliano y su loca esposa, Carlota.
Acaso la gota que derrama el vaso es el manejo electoral de la pandemia. Con un ejército de “Servidores de la Nación”, en remedo a José María Morelos, auténtico “Siervo de la Nación”, manipula las vacunas contra el Covid-19 a cambio del voto.
En la sumatoria son más, muchísimos reclamos ciudadanos más que están llevando al derrumbe de Morena el cual presumiblemente se haga manifiesto el 6 de junio en las urnas.
Por ello a Morena le interesa que no acudas a las urnas.
Tiempo al tiempo.
*Premio Nacional de Periodismo