Policías veracruzanos de confianza
La vuelta a Veracruz en un teclazo
Yamiri Rodríguez Madrid
Tras la descentralización de los cuerpos policiacos y la reconformación de las policías municipales, hay un problema latente: la negativa de varios presidentes municipales veracruzanos de otorgarles los derechos laborales que les corresponden a los elementos.
Un ejemplo de lo anterior es el Ayuntamiento de Xalapa, quien no paga ante el Instituto de Pensiones del Estado (IPE) sus obligaciones para cada uno de los más de 400 policías municipales, pese a que tiene una de las corporaciones más grandes de la entidad.
En la misma situación se encuentra el Ayuntamiento de Coatzacoalcos. Veracruz y Boca del Río empezaron a pagar al IPE, pero después dejaron de hacerlo. Y de los pocos ayuntamientos responsables, se enlista a Minatitlán, que signó un convenio de adhesión con el IPE para incorporar a sus policías
Si bien el Instituto opera también las 173 pensiones a familiares de policías caídos en cumplimiento de su deber, a través del fondo que les envía la Secretaría de Finanzas y Planeación (Sefiplan), mandatado en la Ley 290 y 240, las autoridades municipales tienen la obligación de darles la seguridad social a sus policías.
En la misma situación se encuentran miles de trabajadores de confianza, quienes tienen hasta 20 años laborando así, pues los ayuntamientos los omiten en las nóminas que reportan ante el IPE.
Volvamos al caso de la capital veracruzana. Con 12 sindicatos, que concentran mil 415 trabajadores que cotizan ante el IPE, dejan fuera a todos los empleados de confianza, pues de acuerdo con información oficial, solo pagan por mil 161, es decir, en las cuentas del Ayuntamiento, solo tiene 5 trabajadores de confianza. ¿Y el resto?
Ya prácticamente en la recta final de sus administraciones, la pelota ahora les tocará a los próximos alcaldes. Así, los policías municipales pasarán por lo menos cinco meses en la indefensión, arriesgando su vida sin que sus jefes respondan por ellos, dándoles el trato de otro empleado más de confianza, quienes tampoco lo merecen.
Lo que no deben pasar por alto es que no es si quiere o no; es un derecho de cada uno de los trabajadores y una obligación de los presidentes municipales.
@YamiriRodriguez