Operación IVD
Pluma Negra
Ignacio Álvarez
Los pleitos entre la familia MORENA no cesan, las ambiciones de poder están por encima del valor supremo que pregonaron e incluso, por encima del proyecto de la sucesión estatal; mientras que desde el primer nivel se tira la línea de orden para dar prioridad y cerrar filas para un sólo proyecto, algunos miembros de ese primer círculo no entienden y anteponen sus intereses personales.
Los intereses políticos ya contaminaron al Instituto Veracruzano del Deporte (IVD) que se ha convertido en el botín de los aspirantes a diputaciones federales y al Senado de la República para operar desde ahí, un posicionamiento de extraños en la zona conurbada Veracruz-Boca del Río.
La disputa territorial de los morenistas reales de Boca del Río es contra los de Xalapa que tienen origen priísta y que buscan penetrar a MORENA para armar grupos de negociación y operación política.
En el último mes, el IVD padeció una desestabilización administrativa pues por ordenes del segundo de la Secretaría de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN), fueron despedidos sin explicación alguna, cuatro jefes de área de la Unidad Administrativa; el Jefe de la Oficina de Finanzas, Carlos Roberto García Zamora, el Jefe de Materiales y Servicios Generales Carlo, Efrén Carral Díaz, el Jefe de Unidad Deportiva Leyes de Reforma, Adolfo Humberto López y el Jefe de la Oficina de Indicadores Daniel Mejía López.
Y es que, el operador político de MORENA en Boca del Río, que picó piedra desde hace más de 10 años, es Carlos Juárez quien trae consigo la verdadera fuerza de ese partido en buena parte de la zona conurbada Veracruz-Boca del Río, pero ahora, el dos de la SEFIPLAN y el propio titular de la SEV se disputan los espacios del IVD para lo que viene.
Desde SEFIPLAN se impulsan a los priístas Felipe Sosa, Lupita Tapia y Fernando Cruz con el apoyo de los regidores de MORENA en Veracruz, Daniel Martín Lois y Lissethe Martínez Echeverría, mientras que desde la SEV se promueven espacios para Diana Santiago y Maritza Cantarell.
La desobediencia a la línea de disciplina que permita cerrar fila al plan de sucesión con una mujer al frente, es ignorada por quienes anteponen sus intereses personal y como consecuencia han sido dados de baja más de 50 empleados del IVD para que sus lugares sean ocupados por operadores de lujo que provienen del PRI
El encargado de los movimientos es el nuevo subdirector administrativo que se llama Oswaldo Cruz Vázquez.