
Redacción / Agencia. México., 01 de mayo de 2025.-La actividad estadunidense se vio afectada en el primer trimestre por un aumento anual de 41% en compras al exterior; “cuando comience el auge, será como ningún otro, tengan paciencia”, clama Donald Trump.
La economía estadunidense se contrajo a una tasa anualizada de 0.3 por ciento durante el primer trimestre, ya que las empresas de la economía más grande del mundo respondieron a la guerra comercial de Donald Trump y se apresuraron a importar bienes.
La caída del producto interno bruto (PIB) —la primera desde 2022— fue peor que los pronósticos más recientes de los economistas y se hace una comparación con el aumento de 2.4 por ciento del cuarto trimestre.
Esto, en gran medida se debió a la prisa de las empresas por comprar bienes en el extranjero ante los aranceles de gran alcance del presidente estadunidense, con un aumento de las importaciones a una tasa anual de 41 por ciento.
Muchos analistas argumentan que la cifra general del PIB se debe principalmente a un aumento extraordinario del déficit comercial de EU, en lugar de reflejar las tendencias subyacentes.
El cálculo que se utilizó determina el PIB restando las importaciones del gasto total, que incluye el consumo interno, la inversión y las exportaciones.
Los economistas de Morgan Stanley dijeron que el aumento de las importaciones al final contribuyó a los inventarios, el consumo y la inversión, factores positivos para el cálculo del PIB que no se reflejaron del todo en los datos publicados.
“En efecto, las importaciones no aparecen completamente en la parte de gasto de las cuentas del PIB y, por tanto, exageran la debilidad del PIB”, señalaron.
Algunos economistas, en cambio, centran la atención en otras medidas, como la inversión y el gasto del consumidor.
Las cifras muestran que la suma del gasto del consumidor y la inversión fija privada bruta aumentó 3 por ciento en el primer trimestre, frente a la tasa anterior de 2.9 por ciento.
En una publicación en su red social Truth Social, Trump sugirió que las cifras “no tienen nada que ver con los aranceles”.
Culpando al expresidente Joe Biden, añadió: “No asumí el cargo hasta el 20 de enero… cuando comience el auge, será como ningún otro. ¡¡¡Tengan paciencia!!!”.
Reconociendo la acumulación de inventarios que ocurrió antes del anuncio de aranceles de Donald Trump este mes, la Oficina de Análisis Económico (BEA, por su sigla en inglés) destacó el aumento de la inversión privada.
Sin esta contribución, la contracción de las cifras del PIB serían a una tasa anual de 2.5 por ciento.
En otra muestra de la magnitud de los esfuerzos de las empresas por importar antes de la imposición de aranceles, el déficit comercial de bienes de EU alcanzó un máximo histórico de 162 mil millones de dólares en marzo, de acuerdo con las cifras publicadas esta semana.
Los economistas anticipan una ligera recuperación en el segundo trimestre, a medida que bajen las importaciones y los consumidores estadunidenses adquieran bienes extranjeros que ya se encontraban antes en los inventarios.
Diane Swonk, economista jefe de KPMG US, indicó que la cifra del PIB quedó distorsionada por los aranceles, y añadió que el “impacto extraordinario” se va a disipar a medida que caigan las importaciones.
Sin embargo, también espera una mayor contracción del PIB en el segundo trimestre, debido al impacto de los aranceles en la demanda interna, un elemento que “es, en última instancia, lo que preocupa”. Los volúmenes de carga del Puerto de Los Ángeles, el muelle más grande de la Costa Oeste de EU, registraron una caída de 30 por ciento esta semana, mientras que se espera que los volúmenes de la próxima semana sean más de un tercio inferiores a los del mismo periodo del año pasado.
Los futuros de acciones cayeron y el rendimiento de los bonos subió ligeramente después de la publicación de los datos. El rendimiento de los bonos del Tesoro a dos años, que se mueve en función de las expectativas sobre las tasas de interés, subió 0.01 puntos porcentuales, hasta 3.66 por ciento.
No se observaron cambios significativos en las expectativas de recortes de las tasas de interés luego de la publicación de los datos, ya que los operadores del mercado de futuros aún contemplan alrededor de cuatro recortes este año.
La BEA indicó que la caída de la producción en el primer trimestre también reflejó una disminución del gasto público.
Añadió que el gasto del consumidor también fue uno de los factores que compensaron parcialmente, pero no del todo, el aumento de las importaciones y la caída del gasto del gobierno.
“Las sólidas cifras de demanda interna son un doloroso recordatorio de lo que pudo ser un aterrizaje suave y armonioso hasta que los aranceles de gran alcance desviaron la economía de su rumbo”, resaltó Eswar Prasad, profesor de la Universidad de Cornell.
Se espera que la guerra comercial del presidente Trump provoque una desaceleración del crecimiento durante el segundo semestre de este año, con el aumento de precios que sean un lastre para el consumo.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) previó la semana pasada que el PIB estadunidense crecería 1.8 por ciento este año, por debajo de su estimación de enero de 2.7 por ciento. Muchos analistas del sector privado no predicen ningún crecimiento.
Fuente: Milenio