-Es de personalidad acomplejada y pequeña, por eso quiere solo incondicionales a su lado, y yo no lo soy
-Si algún día decido irme del PAN lo haré por mi voluntad y saldré por la puerta grande, no expulsado por un mediocre
Redacción / Ventanave. México. 14 de noviembre del 2024.- Sin notificarme nada, sin decir por qué, Markito Cortés quiere expulsarme del PAN, organización a la que me afilié hace 20 años y por la que luché hasta lograr consolidarla como la fuerza política más importante de Veracruz y ganar el gobierno de esa entidad.
Mientras millones trabajamos sin descanso por Acción Nacional, Markito se daba vuelo con sus candidaturas plurinominales como la que hoy lo llevó de nueva cuenta al Senado de la República.
Unos luchábamos en las calles contra el régimen, mientras Markito luchaba en las oficinas para obtener concesiones de CONAGUA para regar sus ranchos aguacateros en Michoacán, amparándose siempre en sus cargos legislativos y sin importar el origen partidista del gobierno.
Creo que las “razones” de este intento de expulsión son haber defendido desde la tribuna del Senado a mi hijo Miguel, agredido cobardemente por Markito mientras se encontraba ausente. Lo haré cada vez que sea necesario: antes que político soy padre.
La otra es haber aparecido en los medios en una conferencia de prensa estando al lado de dos legisladores de Morena.
No me preocupa en lo más mínimo ¡Me preocuparía salir en una foto con Markito! ¡Qué vergüenza! ¡Retratarme junto al enterrador del PAN! ¡Nunca!
¡Qué bueno que ya se va Markito de la dirigencia del PAN! Al ritmo que lleva la salida de panistas un rato más y no habría quien cerrara la puerta.
¡Nos vemos en los tribunales, pequeño; te daré una lección más de dignidad y talento!