- Reitera que ya se atiende con seguridad y brigadas de bienestar a los habitantes de la región afectada
Carlos Guzmán | Corresponsal CDMX.México. 14 de agosto del 2024.- Tras ja persistencia de la situación de los desplazados en municipios como Chiconuselo y La Concordia, Chiapas, este miércoles el presidente de México, Andrés Manuel López reiteró que se mantiene el trabajo en campo para atener la situación.
Al tiempo de reconocer que siguen estando detrás de este problema dos grupos armados que se disputan la zona (Cartel de Sinaloa y el Cartel de Jalisco Nueva Generación), el primer mandatario de la nación insistió en que también se está reforzando la presencia de seguridad y de los programas sociales en la zona para los habitantes de la región con el conflicto.
Asimismo censuró a las organizaciones “Independientes” de Derechos Humanos de estar lucrando con el tema, al tiempo de recibir la comunicación telefónica de la Secretaria de Gobernación, Luisa María Alcalde, la cual informó que el número actual de desplazados en territorio de Guatemala es ya no es de más de 500 sino de solo 200, principalmente oriundos de Amatenango de la Frontera y del ejido Nuevo Amatenango.
“Ya solo son 200 personas procedentes de Amatenango de la Frontera, Chiapas, las que han cruzado la frontera a Guatemala, están siendo atendidas, ya se aplica una estrategia integral que incluye el Tianguis del Bienestar para atender a los desplazados; en Amategango se hará una instalación de servidores públicos y efectivos de la
Guardia Nacional para brindar seguridad”, indicó la también encargada de la política interna del país.
Para finalizar, recordó que su Gobierno está atendiendo el problema de inseguridad en Chiapas, al tiempo que precisó que en Chiapas la pobreza disminuyó 10% con relación a 2018, por lo que es la entidad del país donde más ha disminuido esta condición económica de los habitantes con relación a ma del resto del país.
Durante los últimos días, reportes periodísticos han indicado que se mantiene la lucha por el territorio del sur de Chiapas entre el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel de Sinaloa (CDS), incluyendo el reclutamiento forzoso de habitantes del lugar para trabajar en favor de cualquiera de los dos grupos criminales.
