Redacción / Milenio. México. 13 de febrero del 2024.- Con 76 votos a favor, el Pleno del Senado aprobó una reforma a la Constitución para prohibir los matrimonios infantiles en las comunidades indígenas.
Se establece que los cambios al artículo 2 de la Carta Magna establecen que los usos y costumbres de una comunidad no estarán por encima del interés superior de la niñez.
Lo anterior, garantiza el derecho de los pueblos y las comunidades indígenas a la libre determinación y, en consecuencia, a la autonomía para aplicar sus propios sistemas normativos en la regulación y solución de sus conflictos internos, siempre que se sujete también al interés superior de niñas, niños y adolescentes, sin que pueda justificarse práctica en contrario por el ejercicio de sus usos y costumbres.
Por un momento el tema no se quería discutir argumentando que no había quórum ni acuerdos, por lo que el panista Damián Zepeda advirtió: “Si hoy no se vota esto, no se va a votar, todos sabemos eso. Se va a inventar otro pretexto”.
La panista Josefina Vázquez Mota, presidenta de la Comisión de los Derechos de la Niñez y de la Adolescencia, celebró que se elimine el matrimonio infantil, dado que se estaban violentado los derechos infantiles.
Aseveró que ni la infancia ni la adolescencia son mercancías, que les den ganancias a personas adultas que lucran con estos actos de venta de infantes para matrimonios arreglados.
“Ya hace un buen rato, comentaba un procurador, justamente, que, en algunas zonas de esta entidad, como en muchas otras de este país, es más cara una vaca, un animal que la vida de una niña, de un niño o de un adolescente”.
“De acuerdo a las cifras oficiales de este gobierno, una mujer es violada cada media hora y esta noche siete niñas y siete niños no volverán a su hogar, desaparecerán siete niñas o siete niños el día de hoy y esta noche habrá siete hogares que probablemente no las volverán a encontrar jamás, así que hoy lo que estamos poniendo a votación”, añadió.
Por otra parte, Geovanna Bañuelos, coordinadora del Partido del Trabajo, expresó que el matrimonio infantil es una violación inadmisible a los derechos de la infancia y de la adolescencia, dado que se privan los derechos de grupos de vulnerabilidad y opresión.
Agregó que los derechos comunales de los pueblos y comunidades indígenas no pueden ser usados como pretexto para violentar los derechos de la infancia y de la adolescencia y, por ello, se debe de poner fin a la violación de las infancias y adolescencias.
La senadora de la mayoría, Margarita Valdez, dijo: “que no quede duda, en el grupo parlamentario de Morena siempre hemos luchado por los derechos de los niños y niñas y no es una lucha de ocasión, ha sido histórica de las mujeres de izquierda y hemos pugnado porque las niñas sean bien tratadas”.
La senadora del Partido Verde, Gabriela Benavides, dijo que “el dictamen precisa que ningún uso y costumbre esté por encima de los derechos de los niños, niñas y adolescentes».
«No más maltrato, no más matrimonios infantiles, no más embarazos producto de creencias o permisos de padres o familiares”.
La minuta se turnó a la Cámara de Diputados para los efectos constitucionales que corresponda.