Redacción / Ventanaver. Xalapa, Ver., 12 de septiembre de 2022.- La tarde del 11 de septiembre de 2022 Monseñor Jorge Carlos Patrón Wong visitó el monasterio Corpus Christi de las Adoratrices perpetuas del Santísimo Sacramento, ubicado en la calle 20 de noviembre.
La visita de Monseñor Patrón fue para presidir la Eucaristía en que la Hermana María del Carmen profesó sus votos perpetuos y consagró su vida para siempre a la adoración de Jesús Eucaristía, carisma de está congregación.
La Eucaristía estuvo concelebrada por el Pbro. Fernando González Topal, capellán, y el Pbro. Luis Acosta.
Durante la homilía el Sr. Arzobispo dijo:
La Palabra de Dios hoy nos ofrece 3 aspectos que podemos meditar:
Conversión
San Pablo dice, Él es mi fortaleza, yo no soy digno, yo era un perseguidor pero el me cambió y me cambió totalmente. Quienesson capaces de responder a la fortaleza de Dios la respuesta se convierte en la vocación.
Intimidad
Aparece Moisés que comienza a ser intercesor, comienza a pedirle a Dios que tenga paciencia y misericordia de su pueblo. Moisés está tan ligado a Dios que él mismo le pide a Dios lo que ha aprendido de Él. En la intercesión de Moisés se muestra una intimidad muy profunda de Dios y Moisés.
La vida radical
En el evangelio podemos ver el amor de Dios radical para nosotros pero también vemos la respuesta de hijo radical y esto puede aplicarse a la hermana Carmen este día en una frase: Ninguna relación llega a su plenitud sin no es esponsal.
Después de la homilía la hermana Carmen se postró rostro en tierra mientras se entonaba la letanía de los santos, las hermanas de la congregación esparcieron pétalos de rosas sobre la hermana postrada. Inmediatamente después se realizó la profesión de votos, así como la entrega de los signos que acompañan a la hermana, a saber: el cirio, el anillo, la Palabra de Dios, el Santo Rosario, las constituciones de la congregación y finalmente, la corona con que culminó el desposo de la hermana con el Amor de los amores, Jesucristo.
La Eucaristía continuó de ordinario y concluyó con la consagración a la Virgen María por medio del canto y la toma de fotografías del recuerdo.
