Los panistas y la Ley Nahle
La vuelta a Veracruz en un teclazo
Yamiri Rodríguez Madrid
Con 38 votos a favor, 3 de los cuales fueron de diputados locales panistas, la zacatecana Rocío Nahle García puede ser oficialmente candidata a la gubernatura de Veracruz. Este martes, en una sesión extraordinaria y virtual, las y los legisladores veracruzanos discutieron una reforma a la constitución estatal a fin de cambiar los requisitos con los cuales se puede considerar que uno es veracruzano.
De todos es sabido que la secretaria de Energía sueña, suspira y aspira con gobernar este estado, pero hasta ayer tenía un impedimento constitucional. Ahora con tener un hijo nacido en este estado y/o cinco años de residencia efectiva puede ser oficialmente veracruzana, con todo lo que eso implica, como el hecho de gobernarlo.
Ojalá la misma prisa y empeño pusieran los diputados veracruzanos para sacar avante otras iniciativas y reformas, como la Ley Monse, por ejemplo, para sancionar a quienes ayuden a escapar a un feminicida, pero pese al número de asesinatos de niñas, jóvenes y mujeres por razones de género, esa no es una prioridad legislativa para Morena y sus aliados.
Así, como los judas no solo del panismo, sino de la oposición, quedaron Nora Jessica Lagunes Jauregui; Hugo González Saavedra y Othón Hernández Candanedo, aún coordinador de la bancada albiazul, pese a los argumentos en contra de sus compañeros Verónica Pulido Herrera, Bingen Rementería Molina, Enrique Cambranis Torres, Jaime Enrique de la Garza Martínez, Miguel David Hermida Copado y de las diputadas del Movimiento Ciudadano, Maribel Ramírez Topete y Ruth Callejas Roldán.
¿Qué pasó ahí? ¿No que ya no funcionaba la tintorería legislativa? Curiosamente Nora Jessica Lagunes hace unos días protagonizó un escándalo, en el que tuvo que intervenir el ejecutivo del Estado, con la directora administrativa del Poder Judicial. En un hecho a todas luces constitutivo de violencia de género y burdo por donde lo vea, en la página del Congreso aparece colgada la carta contra Joana Marlen Bautista Flores, autorizada claro está, por la cabeza del Congreso Local.
El ex presidente municipal de Misantla se ha aferrado con uñas y dientes a la Coordinación de la bancada panista, pese al cambio de dirigencia estatal y que él se supone que es de otro equipo político del PAN, aunque con ese voto, parece que juega, pero en otro bando partidista. Hugo González Saavedra ha desempeñado un papel tan gris, que sin duda esto es lo único que ha hecho en el Congreso; por este voto ha tomado notoriedad y no precisamente para bien.
Con las lealtades expuestas, con las cartas sobre la mesa, ¿vendrá la expulsión del partido para estos tres, para verlos en abierto haciendo campaña con Nahle o seguirán en su papel de supuestos opositores, aunque son más bien caballos de Troya? A esperar.
@YamiriRodriguez